Andrés Guardado afrontarará su derbi 13 ante el Sevilla con el arquero del segundo equipo como titular
Fran Vieites sustituirá a Claudio Bravo, que sufrió un problema muscular, ante la ausencia de Rui Silva, que tiene una dolencia en los isquios
Desde que Andrés Guardado llegó al Betis su equipo lleva nueve partidos sin poder ganar al Sevilla. Tres empates y seis derrotas son las estadísticas de esas últimas cuatro tempordadas y media. El mexicano sólo le ganado dos veces a su cásico rival con la camiseta verdiblanca en 12 encuentros y ahora afrontará este nuevo desafío con un portero inusual.
Los malos presagios con los que terminó el partido de anoche frente al Aris Limassol de la UEFA Europa League por el problema físico que sufrió Claudio Bravo poco antes del minuto 90, cuando tuvo que salir para abortar una ocasión del gol del conjunto chipriota, se han confirmado este mediodía. El guardameta chileno sufre una lesión miotendinosa proximal de la musculatura isquiotibial izquierda.
El Betis ha hecho público el parte médico del futbolista tras las pruebas a las que se ha sometido este viernes. Una lesión que le mantendrá algunas semanas de baja y le impedirá jugar el derbi sevillano del próximo domingo en el Ramón Sánchez-Pizjuán, provocando un importante problema en la portería para Manuel Pellegrini, que tampoco podrá contar para este encuentro con Rui Silva.
El portugués sufrió un problema en los isquios durante un entrenamiento esta semana y el propio técnico bético descartó que pudiera estar de regreso antes de la fecha FIFA que arranca la próxima semana. Así que la responsabilidad en el partido de máxima rivalidad local recaerá en el tercer portero, Fran Vieites, que ya se estrenó con el primer equipo en la visita a Montjuïc frente al Barcelona, en septiembre.
Fran Vieites, canterano del Celta
El guardameta pontevedrés, canterano del Celta, llegó a jugar en Segunda división con el Lugo antes de hacer las maletas rumbo a Sevilla para formar parte del Betis Deportivo, de Segunda Federación. Esta temporada compagina la portería del filial con el rol de tercer guardameta del primer equipo, con el que tuvo la oportunidad de estrenarse precisamente tras una lesión de Rui Silva en un partido en el que Claudio Bravo no estaba citado por un problema físico.